Esta fruta nace de una especie desconocida de hylocereus que es la más única de todas las vides de pitaya de nuestra colección. En lugar de tener internodos rayados, los nodos están formando secciones elípticas de crecimiento continuamente. Además, esta vid es de crecimiento particularmente lento y tiene cinchidad tremendosa. La fruta es de color arándano con relativamente pocas semillas y buen sabor. Esta variedad requiere polinización cruzada y sería más apreciada por un coleccionista.
